Resumen de la jornada de huelga

La huelga convocada para el 29 de marzo de 2012 ha supuesto, en todos los aspectos, un éxito.
Los comercios han secundado la huelga general, cerrando durante todo el día.
Los vecinos y vecinas han mostrado su apoyo asistiendo a las concentraciones y a la manifestación convocada.
Y el comité de huelga ha trabajado para crear un espacio abierto para mostrar el rechazo a la reforma y los recortes.


A pesar de que algunas personas se han desplazado a sus trabajos fuera del pueblo, muchísima gente ha mostrado su valentía, arriesgándose y haciendo huelga en sus respectivos trabajos.
Las manifestaciones convocadas en Bilbao por la mañana han atraído a personas del pueblo, que han mostrado su rechazo a la reforma laboral sumándose a la muchedumbre que ha invadido la capital de Bizkaia.
En Trapagaran, a los comercios que ya habían anunciado su cierre el día anterior, colgando los carteles de "itxita", se han sumado durante la mañana los pocos que permanecían abiertos.
El Eroski, que al ser el único comercio abierto se aprovechaba del cierre de las tiendas pequeñas con el monopolio en la venta en día de huelga general, ha cerrado a media mañana.


También el polideportivo y las piscinas municipales se han sumado al cierre, con lo que la actividad laboral ha quedado totalmente paralizada en el pueblo.


Las grandes excepciones han sido el colegio Franciscanas de Montpellier, que como colegio concertado está en el punto de mira de los recortes, y cuya plantilla se ve directamente amenazada por estas reformas; y la panadería "Atsegia" (que pertenece a una cadena con otras tiendas en Santurtzi, Barakaldo y Portugalete). Esta panadería ha estado vendiendo pan toda la mañana, y aunque varias veces ha amagado el cierre al paso de los piquetes, ha decidido permanecer abierta, llevándose toda la clientela del resto de panaderías del pueblo, que ese día han decidido cerrar.

En general, la respuesta de la población ha mostrado que la huelga general tiene un gran apoyo en Trapagaran, y que muchos vecinos y vecinas han dado un paso adelante, arriesgándose por el bien común de cara al futuro, y olvidándose del interés individual a corto plazo.